Sonrean Enrique Cerezo y Miguel ngel Gil cuando Eric Abidal meta al Atltico de Madrid en el bombo E del sorteo de la fase de grupos de la Champions, el pasado agosto. En el grupo ya esperaba el Feyenoord, y despus caeran el Lazio y el Celtic de Glasgow. En lo deportivo, no eran malos emparejamientos para olvidar la mala fase de grupos del ao pasado. La aficin respiraba y, sin embargo, el coordinador de Seguridad de la Polica Nacional del Atltico suspiraba.
“Siempre estoy atento al sorteo para saber qu aficiones nos tocan, y este ao pens: ‘Uff, las ms complicadas'”, cuenta a EL MUNDO Manuel (nombre ficticio), el coordinador de seguridad del equipo rojiblanco desde hace seis aos. En efecto, las aficiones de Feyenoord y Lazio son de las peores, pero el Frente Atltico no se queda atrs, con dos asesinatos en su historia reciente: el del realista Aitor Zabaleta, en 1998, y del deportivista Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy, en 2014. “A da de hoy, la ms violenta es la del Feyenoord”, aade.
Para saber ms

El ftbol, los hijos y la pelcula perfecta
La visita de los ultras holandeses, Het Legioen (La Legin), a Madrid hace unas semanas dio una muestra de lo que pueden hacer. En 24 horas, una paliza a un joven en el centro de Madrid, altercados en la zona VIP del Metropolitano saldados con la detencin de seis hinchas, uno menor de edad, y una draca contra miembros del Frente Atltico. “Las dracas las pusieron de moda las aficiones rusas”, explica el responsable policial. Son quedadas para pegarse con reglas determinadas, normalmente de tiempo y de uso o prohibicin de ciertas armas.
En Roma no se olvidan del paso de los holandeses en 2015 por una eliminatoria de Europa League ante la Roma. La plaza de Espaa en la capital italiana sigue en obras por los incidentes que protagonizaron contra la polica. El saldo de la trifulca, 23 detenidos y una multa de 45.000 euros para ocho de ellos.
“El partido del grupo que ms me preocupa es el de Holanda”, cuenta el coordinador policial una vez superado el paso de los holandeses por Madrid. “Dos no se pelean si uno no quiere y a m siempre me resulta ms fcil controlar a los mos aqu”, aade. l es uno de los Coordinadores de Seguridad a los que da apoyo y gestiona la Oficina Nacional de Deportes (OND), cuya funcin principal es la prevencin de la violencia en los espectculos deportivos.
Oficina Nacional del Deporte
Hay un Coordinador por cada equipo de ftbol hasta Primera RFEF y tambin, otro por cada club de ACB y, aunque tambin tratan el resto de deportes, el ftbol “ocupa el 99%” de nuestro trabajo, explica Marcos (nombre ficticio), el jefe de la OND. “En 10 aos que llevo aqu, de hpica, por ejemplo, solo hemos tratado un incidente”, aade el responsable.
Los coordinadores de la OND organizan desde la sala de Unidad de Coordinacin Operativa (UCO) los servicios de seguridad y emergencias de cada evento deportivo. Administran todas las unidades policiales nacionales y locales; los servicios de salud, los bomberos y todo lo relacionado con el buen funcionamiento del evento. “Nuestra responsabilidad tambin es que si hay un infarto en una grada, esa persona pueda ser atendida lo antes posible”, cuenta Marcos.
El atentado en la sala Batacln es uno de los episodios que produjo una compresin inmediata de la seguridad e influy en el funcionamiento de esta oficina y de todas las que existen a nivel europeo, coordinadas entre s a travs del National Football Information Point (NFIP). La peor masacre ocurrida en territorio continental francs desde la Segunda Guerra Mundial afect directamente, por ejemplo, al clsico de la Liga, en 2015.
El Real Madrid- Barcelona se produjo apenas seis das despus de los ataques en la capital francesa. El partido dispuso de 1.100 policas y 1.400 vigilantes de seguridad, el mayor despliegue de seguridad en nuestro pas hasta la fecha. El clsico, las finales de Copa del Rey, nos los empezamos a tomar como un reto para ir mejorando y afrontar otros eventos como la final de Champions en el Metropolitano o la Libertadores, explica el jefe de la OND.
La final de la Libertadores, un partido declarado de alto riesgo, se organiz en tiempo rcord y fue uno de los mayores xitos para la seccin. “Estuvimos 15 das seguidos trabajando sin descanso”, revela Marcos. Pretemporada para lo que les viene en el 2030: el Mundial ser el mayor reto en este siglo para esta oficina.
La recepcin de 48 aficiones y sus ultras sern un gran problema para la OND. Un problema que en Espaa est relativamente controlado segn la Polica Nacional. “El fallecimiento de Jimmy supuso un punto de inflexin”, explica el jefe de la Oficina. Estos hechos provocaron cambios en la Comisin Antiviolencia, en el CSD y en LaLiga, que no tena Departamento de Seguridad. Entonces lo crea.
“Estamos en un momento menos violento que hace unos aos, pero sigue habiendo ultras y sigue habiendo violencia”. El que habla es Miquel Ramos, el autor del libro Antifascistas en el que dedica un captulo a los ultras de ftbol. Ramos los sita “diluidos” entre las gradas de animacin y en las afueras del estadio. Y la Polica Nacional no le quita la razn salvo con el Real Madrid: “Se enfrent directamente a ellos. Sin embargo, hay otros clubes que no son capaces y claro, al final lo que les pasa es que alimentan una bestia que cada vez es ms nerviosa”, cuentan.
En el ltimo partido entre Real Madrid y Braga en el Bernabu, un mensaje de la grada flan (como llaman a la madridista Grada Fans los ultras de otros equipos) para los Ultras Sur: “Fuera violentos de los estadios”. Ese tipo de grada es la que la Polica Nacional quiere que se prodigue por todos los campos de Espaa, pero no todos los clubes estn por la labor, porque tienen miedo de perder apoyo en las tribunas.
El ejemplo lo hemos visto recientemente con Los Biris, los ultras del Sevilla, teniendo la posibilidad de hablar con los capitanes y el entrenador por la mala situacin del equipo. “Los ultras venden acceso y es muy atractivo para los ms jvenes”, cuentan desde la OND. Precisamente, tambin advierten de la renovacin en las gradas ultra y de la dificultad de controlar unos elementos cada vez ms desestructurados porque “no se sabe quin manda”.
No obstante y pese a todos los problemas que podamos tener en Espaa, desde la OND creen que estamos mejor que otros pases Europeos y hablan de Alemania, Francia, tras los recientes y desagradables incidentes con el Olympique de Marsella, y tambin de Italia. “Aqu la violencia no se ha reducido, solo que ahora gobierna la derecha y como muchos ultras estn relacionados con ella, se habla menos de ello”, explica Diego Mariottini, periodista y escritor de varios libros relacionados con el fenmeno ultra.
El autor italiano conoce de primera mano el fenmeno ultra en su pas y especialmente el de los Irriducibili, los ultras del Lazio, supuestamente disueltos tras el asesinato en 2019 de su lder, Fabrizio Piscitelli, relacionado con casos de narcotrfico y la mafia. Pero, como en Espaa, lo que verdaderamente supuso un shock para la sociedad italiana fue la muerte, en 2007, a manos de la polica de un hincha lazial, Gabrielle Sandri, del que an hay pintadas por Roma. “Fue un momento importante para replantearse la forma de animar, pero tambin las relaciones con otros aficionados y con las fuerzas policiales”, analiza Mariottini.
En Espaa la relacin entre ultras y la Polica no es tormentosa. El coordinador del Atltico dice que los radicales suelen hacerle caso principalmente en los desplazamientos. Aunque hay aficiones ms complicadas que otras, y los miembros de la OND hablan del derbi sevillano, el asturiano y el canario como los partidos ms complicados. La pregunta es si este fenmeno acabar por extinguirse. “Es difcil, porque ese empoderamiento de pertenecer a un grupo no desaparece y se van regenerando”, explica el jefe de la OND, que siempre est alerta.