Diez aos despus, todo el mundo recuerda lo que pas en la maana de aquel 30 de noviembre de 2014. Lo incuestionable es que fue asesinado Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy, 41 aos, entonces padre de un nio de cuatro y de una adolescente de 19, que antes fue apaleado y lanzado al ro Manzanares junto a otro individuo. Y que hoy, 10 aos despus, su muerte sigue sin culpables y en el ftbol el movimiento ultra tiene un repunte peligroso.

Fue una quedada por redes entre ultras del Frente Atltico y de los Riazor Blues, a las 8 de la maana. Cuatro horas antes del partido que enfrentaba al Atltico de Madrid frente al Deportivo de la Corua en el extinto Vicente Caldern, zona de guerra. Una cita de la que la polica no tuvo noticias hasta que fue demasiado tarde, cuando ms de 200 personas recorran Madrid Ro con palos, defensas, puos americanos y alguna navaja. De ella sali el segundo muerto del Frente Atltico tras Aitor Zabaleta, pero ningn condenado.

El 16 de octubre del ao pasado, la Audiencia Provincial de Madrid revocaba el cierre del sumario del caso Jimmy por “indicios delictivos claros” para, por lo menos, determinar si se debe abrir juicio oral y as “decidir la posible responsabilidad de una persona determinada”. Era un auto esperado por las acusaciones. “No conozco un caso que haya estado 10 aos en un juzgado de instruccin con unos indicios similares. Es, cuanto menos, extrao”, declara una de esas acusaciones a este peridico.

La Audiencia confirmaba tambin que la causa estaba pendiente de un informe pericial de LaLiga basado en un anlisis colorimtrico de las imgenes que ayudara a la identificacin de los responsables, tanto del asesinato de Jimmy como de las lesiones de Santiago A. M., la otra persona lanzada al ro. “Es el mismo grupo agresor el que realiza los dos hechos delictivos”, aducen fuentes de la investigacin.

De hecho, LaLiga ya consigui en su da la identificacin de uno de los implicados en el lanzamiento de Santiago al ro con esa tecnologa, que se basa en una asociacin de los colores con la ropa del individuo. La idea de estos informes es que ayuden, junto a los testimonios, a cerrar el cerco sobre los sospechosos sealados por los testigos. No obstante, el juzgado de instruccin nmero 20 ha tardado un ao en entregar todas las pruebas audiovisuales a LaLiga. El organismo necesitar ahora, como mnimo, un mes para realizar su informe. “Si concuerda con los testimonios ser un elemento ms, pero si no, la Audiencia Provincial ya tiene razones para seguir”, expresan desde la organizacin.

Servicios de emergencias en el lugar de la ri

Servicios de emergencias en el lugar de la ria.EM

Son dos los testimonios que sealan la presencia de los mismos individuos tanto en el asesinato de Jimmy como en la agresin a Santiago: el de un cachorro del Frente Atltico implicado en la ria y el de la ex novia de uno de los ultras rojiblancos. Ambos apuntan al mismo individuo, Diego P., como principal sospechoso en la muerte del seguidor del Deportivo. “Cuando diferentes personas dicen lo mismo, eso tiene una trascendencia”, explican desde una acusacin.

“Yo tir a Jimmy al ro, yo lo tir… mira ese soy yo… s, yo lo tir, yo me lo cargu”. As se expresaba Diego P., segn la testigo, en una de las fiestas que reuna a varios miembros del Frente Atltico en las que revisaban las imgenes de la ria tumultuaria que enfrent a los ultras rojiblancos con los del Deportivo de La Corua. Curiosamente, esa persona no estuvo entre los primeros acusados por los delitos cometidos aquel da, que fueron examinados en diferentes juzgados y por diferentes jueces, y por los que se detuvo a ms de un centenar de personas. As, se libr de los casi seis meses en prisin preventiva que pasaron Ismael L. P., Sergio S. M., Francisco J. L. y Jos Luis Z. y del internamiento del entonces menor lvaro C. G., Kit Kat, revocado por la Audiencia.

Aquel fro y nublado 30 de noviembre, Kit Kat ya envi un mensaje a su novia a las 9.26 de la maana que deca: “Le hemos reventado, sin porra me he quedado, le he pegado un palizn a uno”. l era uno de los que perteneca al grupo que, presuntamente, hiri a Santiago y revent el bazo de Jimmy, causa de su muerte, segn el informe forense. Increblemente, tambin fue otro de los lderes en los incidentes contra Courtois del pasado derbi del Metropolitano.

Ultras durante la ri

Ultras durante la ria en la que muri Jimmy.EM

Diez aos despus, las acusaciones y los investigadores siguen sin explicarse por qu la investigacin judicial, que se llam Operacin Neptuno, no ha llegado, de momento, a ningn sitio. Fuentes conocedoras del caso sealan la interinidad de los jueces que pasaron por la instruccin como uno de los elementos perjudiciales para obtener, al menos, una vista oral. “El empeo de Laliga es que ste es uno de los actos ms extremos de violencia en el ftbol espaol e intentaremos que se lleve a juicio a las personas responsables de ello, y haremos todo lo que est en nuestra mano para que no quede impune”, explican en la patronal.

Y luego est la familia de Jimmy, que lleva 10 aos esperando justicia, pero que se mantiene hermtica respecto a compartir sus sensaciones sobre lo ocurrido a Francisco Javier. No olvidan el trato recibido cuando se produjeron los hechos de los que hoy esperan conseguir, al fin, un juicio en el que se sienten los responsables del asesinato de su familiar.

La muerte del seguidor del Depor no tiene culpables, pero s ha provocado que el mundo del ftbol seale, aunque no unnimemente, a los ultras como un fenmeno a erradicar. “A partir de Jimmy tuvimos que cambiar muchas cosas, no slo nosotros, tambin LaLiga y los clubes espaoles”, explica a EL MUNDO el jefe de la Oficina Nacional del Deporte, rama de la Polica Nacional cuya funcin es la prevencin de la violencia en el deporte.

El alto cargo policial explica cmo se intensificaron los protocolos de seguridad en las aficiones, especialmente la visitante: control de entradas y desplazamientos y tickets nominativos, entre otros. Con los protocolos actuales, hubiera habido ms posibilidades de evitar la “coronacin del estadio”, nomenclatura ultra para la persecucin de una aficin rival que llega sin escolta. Otro de los cambios a raz de aquel suceso es que ahora a estos grupos ya se les cataloga como violentos y se les trata como tal judicialmente. A da de hoy, hay 14 en Espaa.

LaLiga tambin cre su departamento de seguridad, que hoy se coordina con la Polica, adems de mantener varias acciones, tanto judiciales como sociales, para erradicar el fenmeno como LaLiga VS. Y el Gobierno, especialmente a travs del CSD, persigue la violencia en el deporte a partir de la judicializacin de los hechos y, en menor medida, por la va de las sanciones administrativas.

Un repunte de ultras

La Polica, no obstante, s observa un repunte entre los grupos ultras no slo en Espaa, sino en toda Europa. De hecho, el descubrimiento de uno de los implicados en la muerte del hincha gallego en los incidentes del ltimo derbi en el Metropolitano pone de manifiesto, segn los agentes, que no todos los clubes colaboran como deberan para detener a este tipo de individuos.

Unos individuos que para Joan Caballero, experto en grupos urbanos violentos, “se han profesionalizado”. “El perfil de hooligan cambia de borracho gordo de bar a tos musculados conocedores de diferentes mtodos de lucha”, cuenta a EL MUNDO. Y que, por medio de la “radicalizacin suave”, memes y humor negro haciendo proselitismo de sus opiniones en redes, consigan atraer o “alinear” un perfil joven a su discurso.

Real Madrid y Barcelona han conseguido eliminar o, al menos, expulsar el problema de los radicales de sus propios estadios. Cuentan los investigadores del caso Jimmy que fueron sus informes los que ayudaron a que el club blanco tomara la decisin de echar a los ultrasur del estadio Santiago Bernabu para instaurar en su lugar la Grada Joven. Precisamente, se cumplen tambin 10 aos desde ese momento. El de Jimmy, sin embargo, parece que la justicia, de momento, lo ha olvidado.