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Para no rendirse hace falta creer ponerse detrs de la bandera de quien no se sienta nunca derrotado. Para el Valencia, uno de esos estandartes es Umar Sadiq. Con un increble taconazo rescat un punto en El Sadar en el minuto 87 cuando Osasuna ya trataba de amarrar la victoria. Fue lo mismo que hizo en Villarreal para dar oxgeno al equipo mientras trepa para salir del abismo. [Narracin y estadsticas: 3-3]

No es casualidad que el Valencia sea el nico equipo de LaLiga que no ha logrado ganar sin el abrigo de su parroquia. Lejos de la coraza de Mestalla, se vuelve dbil, quebradizo por ms que, a rfagas, de signos de que puede lograrlo. Siempre ocurre algo que le deja en el camino al menos dos puntos. En Pamplona fueron demasiadas cosas.

Lleg a El Sadar preparado para la brega bajo la premisa de Corbern de jugar con tres centrales y con Rioja esforzado en las vigilancias a Bryan Zaragoza. De ese duelo entre pillos saltaron chispas, pero el Valencia pareca ms centrado que Osasuna. Un disparo de Enzo Barrenechea y alguna ltima mala decisin de Sadiq en el rea inquietaban a los rojillos, que se vieron con un gol en contra en el primer cuarto de hora y por las lneas del VAR. Rioja busc a Diego Lpez a la espalda de Catena, la corri el asturiano sin mirar la bandera del asistente, recort a Sergio Herrera y marc. Por si acaso. Hizo bien, porque la revisin determin que haba partido en posicin correcta y el gol subi al marcador.

Pudo Sadiq hacer el segundo cuando Gay le puso un baln al punto del penalti, pero en lugar de buscar el disparo intent asistir a Diego Lpez. El nigeriano acabada de impedir que el Valencia tuviera un minuto de tranquilidad, porque Osasuna empez a despertar. Bryan consigui burlar a su sombra sevillana y oblig a Mamardashvili a rechazar su disparo cruzado. El extremo haba cogido carril y desde la banda busc a Budimir en el corazn del peligro. Solo pudo el croata rebaarla desde el suelo para que Aimar Oroz la enganchara ante la pasividad de la nutrida defensa valencianista.

El partido iba de golpe en golpe y no estaba todo dicho. Si apareci Oroz, con tres kilos menos por una gastroenteritis, tambin lo hizo Javi Guerra para cabalgar hasta la lnea de fondo y poner un centro que, ahora s, Sadiq mand al fondo de la portera. Se haba repuesto el Valencia y, una vez ms, no supo manejar su ventaja por Osasuna mostraba ms empaque. De hecho, en apenas seis minutos al filo del descanso le dio la vuelta al marcador.

Aimar Oroz festeja su segundo gol ante el Valencia.

Aimar Oroz festeja su segundo gol ante el Valencia.EFE

Primero con una genialidad de nuevo de Aimar Oroz, que saba que no aguantara todo el duelo y se exprimi. Se escap Areso por banda derecha para poner un centro que caz de volea picada en la frontal sin que Mamardashvili, algo adelantado, pudiera atajarla. El talentoso centrocampista actu por instinto, pero hubiera tenido tiempo para pensar porque para el Valencia fue invisible en esa jugada. Nadie le importun.

Si el empate fue un mazazo para el equipo de Corbern, el penalti de Mosquera a Rubn Garca con el tiempo cumplido, tan indiscutible como innecesaria la jugada, lo fue ms. Esta vez Budimir enga el guardameta georgiano para convertirse en el mximo goleador de la historia de Osasuna en Primera Divisin con 58 goles. El 59, cuando encaraba de nuevo la portera valencianista solo, lo envi a la grada.

Osasuna haba dado la vuelta al marcador en un partido en el que enmend sus errores mejor que el Valencia, revolucionado en la segunda parte. Tuvo que salir del campo Oroz por lesin y los ataques se espaciaron a pesar de que a Bryan Zaragoza se le escap el cuarto ajustado a la escuadra valencianista. Corbern miro al banquillo y lanz el rdago junto a Sadiq con Rafa Mir. La tuvo el murciano de cabeza, como tambin Rioja con un zurdazo cruzado que se perdi rozando el poste. Apretaban a un Osasuna que empez a protegerse para aguantar su ventaja secuestrando el baln. Mientras, el Valencia sac del campo a Gay despus de una entrada y a Javi Guerra, dos decisiones sorprendentes.

Cuando nada pareca suficiente para evitar que los rojillos sumaran por que nada ocurra… hasta que apareci Sadiq para hacer magia. Con un taconazo convirti a un centro de Cans en el gol del empate porque Catena, en el aadido, err el testarazo que hubiera vuelto a romper la igualada.