Diego González
Fotos: Sixto Picones
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Mostrando un espíritu de hermandad, este martes feligreses se reunieron en la misa celebrada en la parroquia de San Judas Tadeo y de la Santa Cruz (Juriquilla), con motivo del festejo del santo que lleva su nombre. El acto religioso fue presidido por el obispo de Querétaro, Mons. Fidencio López, quien a modo de reflexión, expresó que Jesús llamó a San Judas, “y ahora nos llama a nosotros para evangelizar”.
En el marco de la misa, Mons. Fidencio López Plaza expresó que en esta época marcada por la incertidumbre, desafíos y pérdida de sentido, San Judas Tadeo se levanta como el patrono de las causas imposibles y fuente de consuelo, así como de esperanza.
Asimismo, indicó que actualmente, “a la manera de San Judas, necesitamos el testimonio de hombres y mujeres que con su vida y con su ejemplo, nos enseñen que con Jesús en el centro, la vida está en casa, la alegría está en casa, la justicia está en casa”.
Tras referirse al evangelio escuchado en la misa, en una primera reflexión, se refirió a la vocación, señalando que todos están aquí porque ha llamado Dios a la existencia, recordando el llamado que El Santísimo hace para -vivir- con felicidad.
En otra reflexión, el obispo dijo que Jesús llamó a San Judas y que ahora llama -a la feligresía- para estar con Él: “Jesús llamó a San Judas y nos llama a nosotros a redescubrir la comunión con los hermanos, la comunión con las criaturas y la comunión con Dios como el camino para aprender a ser felices de verdad y a vivir como hijos de Dios”.
Según López Plaza, nadie puede considerarse cristiano completo si no ha encontrado un espacio en esta vida para vivir la fraternidad, para vivir en comunidad y para aprender a convivir como hermanos.
En un tercer punto, Mons. Fidencio señaló que Jesús llamó a San Judas y “ahora nos llama a nosotros para evangelizar”. En el marco de la misa, la feligresía se unió como hermandad para cantarle a San Judas Tadeo, teniéndose además la presencia de una de sus reliquias, y concluyendo con la bendición de imágenes y demás artículos por parte del obispo. Cabe mencionar que la comunidad le hizo y entregó un ramillete espiritual al obispo.