Apuntes del periodismo queretano

Por Manuel Paredón

Noticias

Primera parte

 

En el ocaso de la vida, se repasan una y otra vez las páginas imborrables de más de seis décadas de ejercicio periodístico que se vieron abruptamente truncados por un violento atentado a mano armada por  la delincuencia.

Los hechos afectaron gravemente a mi esposa Graciela que a más de tres  años no ha logrado superar el trauma   por lo que en ningún momento  se queda ni quiere estar  sola y permanecemos a su lado, viendo desde casa el lento transcurrir de los días, semanas  y meses.

En esos momentos de soledad vienen a la fatigada memoria las imborrables escenas de toda una vida en los medios de comunicación que desde los 14 años y casi frisamos los 82.

Al reprobar la materia de música,  en la Secundaria Federal Numero 1, me separaron de los estudios y a buscar trabajo que no fue fácil conseguir.

Gracias a Don Manuel “Charolito” Ramírez, entonces linotipista del desaparecido periódico “Amanecer”, único diario que circulaba en aquella década de los 50s, fue posible conseguir una plaza como ayudante de linotipos.

Pero hubo una condición: el director del periódico  Don Guadalupe Ramírez  Álvarez  pidió al “Charolito que me cuidara por la edad para esa clase de tan pesado trabajo.

Y es que se entraba a trabajar a las 5 de la tarde para terminar hasta las 3 o 4 de la mañana y con frecuencia hasta más tarde, cuando fallaba uno de los linotipos o se interrumpían las comunicaciones  y no llegaban las noticias  por el teletipo.

El salario: 3 pesos diarios  y no había descanso, mientras que el director percibía 700  pesos semanales.

El primer  ascenso, ayudante de oficinas que abrió la posibilidad  para conocer  y convivir con los  reporteros de aquella época, Francisco Peña Zamora, Joaquín Zúñiga: El Valeco”, Adolfo Ortega Zarazúa, Jorge Galván Papadimitriu, Heriberto Aguilar Sánchez, Juan Trejo, Antonio Sánchez y al fotógrafo Esteban Galván Rivera.

Me apasionaba tanto su trabajo que me las ingeniaba  para seguirlos cuando salían a reportear y en una libreta escribía lo  escuchado en las entrevistas.

Luego a practicar la mecanografía y  escribir una notita.

Al siguiente día, contrastaba lo que habían publicadolos reporteros con el trabajo realizado y veía como se  debían hacer las cosas.

Así  aprendimos las  primeras letras del periodismo.

Don Salvador Borrego  que por unas  semanas fue jefe de redacción de Amanecer, habría escrito el libro Periodismo Trascendente  y me regalo algunos de sus apuntes para reportear y escribir una nota.

Transcurría  el año del 56 cuando hubo dos vacantes en la redacción de Amanecer que habían dejado Francisco Peña Zamora y Joaquín Zúñiga Ibarra que se incorporaron al gabinete del gobernador Juan C.  Gorráez. Con Luis Amieva Pérez, entonces corrector de estilo de ese medio, le solicite al director Guadalupe Ramírez Álvarez. Amieva fue el primero en tratar el asunto y en menos de cinco minutos, consiguió la plaza. Reportero de información general.

En cuanto a mi caso no fue fácil, una y otra vez la suplica para que se me diera  la soñada oportunidad.

Finalmente,  el  licenciado Ramírez accedió no sin antes haber pasado por una prueba de  mecanografía, redacción, ortografía, y construcción gramatical.

La advertencia no se hizo  esperar; a prueba durante dos semanas en la sección de policía.

Desde aquel lejano 1956, han pasado más de 60 años  en el ejercicio de esta sin igual profesión.

Antes de seguir adelante, viene a mi memoria  aquel año de 1958 cuando en la fragorosa huelga por la autonomía de la  Universidad de Querétaro, estallada por la comunidad estudiantil encabezada por  un grupo de inquietos jóvenes, entre otros, Álvaro Arreola Valdés, Jorge Hernández Palma, Sergio Siliceo, Hugo Terán, Manuel Vega, José Ramírez Perea y don   Rogelio Garfias Ruiz, así como algunos otros que escapan a la memoria.

Eduardo García Chavero, que se había sumado al movimiento fue comisionado para que un grupo de preparatorianos vigilaran cada una de las puertas del Alma Mater y ningún extraño retirara las banderas rojinegreas.

Ante las presiones del estudiantado que contaba con el respaldo de la sociedad queretana y de otras universidades, el gobernador Gorráez concedió la autonomía a la Máxima Casa de Estudios  y reinstaló en la rectoría al Licenciado Fernando Díaz Ramírez.

En un encuentro del gobernador Gorráez con  los huelguistas a quienes recibió en el Salón de los Espejos del antiguo Palacio de Gobierno, uno de los estudiantes le corto la corbata al mandatario como señal del triunfo logrado.

Terminado el movimiento que había paralizado algunos sectores de la población,  el Licenciado Guadalupe  Ramírez Álvarez, invitó al Licenciado Rogelio Garfias Ruiz a incorporarse a la plantilla de reporteros del “Amanecer”, asignándole la sección de sociales que había dejado Adolfo Ortega Zarazúa para seguir su carrera de abogado.

El talento del Licenciado Garfias, le abrió las puertas para que ascendiera a la información general, asignándole la fuente de Gobierno.

Al aproximarse el final del sexenio del gobernador Gorráez, el PRI nombró como su candidato a la gubernatura del Estado al ingeniero Manuel González de Cosío.

Entonces, Ramírez Álvarez, comisionó al Licenciado Garfias para que cubriera la campaña, llevando como fotógrafo a Sergio Pheiffer que hubo de dejar su trabajo en una refaccionaria y entregarse de lleno a las cámaras.

El Ing. González de Cosío llega a la gubernatura y en sus primeros nombramientos coloca al Licenciado José Arana Morán en l  Secretaría de Gobierno, al Licenciado Leopoldo Espinosa Arias  en la Oficialía Mayor  y al Licenciado Garfias en la Dirección de Comunicación Social.

El licenciado Ramírez Álvarez,  pide al Licenciado Garfias que siga como reportero del Amanecer.

De esta manera, el  Licenciado Garfias, inicia su brillante carrera en el periodismo

En el siguiente sexenio que presidio Don Juventino Castro Sánchez, el Licenciado Garfias, siguió al frente de la Dirección de Comunicación de Gobierno del Estado.

En 1973, al final de la administración de Don Juventino Castro Sánchez, el Licenciado Garfias se retira del servicio público para iniciar su añorado proyecto, la creación de la empresa Editora Offset Color y la fundación de Noticias Diario de la Mañana, que mantuvo  exitosamente hasta que fue llamado a la Casa del Padre.

A lo largo de toda una vida entregada al periodismo, fuimos testigos del transcurrir de las administraciones de los gobernadores Juan C. Gorráez, Manuel González de Cosío, Juventino Castro Sánchez, Antonio Calzada Urquiza, Rafael Camacho Guzmán, Mariano Palacios Alcocer Enrique Burgos  y de la llegada al  poder del Partido Acción Nacional con Ignacio Loyola Vera y Francisco Garrido Patrón.

Asimismo de la del último triunfo del PRI con José Calzada Rovirosa y el regreso del blanquiazul a la Casa de la Corregidora con Francisco Domínguez Servién.

Al gobernador Mauricio Kuri tratamos de  entrevistarlo cuando ocupaba importante puesto en la iniciativa privada, pero nunca fue posible  ese encuentro.

En algunas peregrinaciones al Tepeyac, lo saludamos de lejos  y hasta ahí.

Reportero de Policía.

Decíamos líneas arriba que este fue el primer trabajo encomendado al comenzar la carrera  en este apasionante oficio.

Fueron casi 30 años en los que atendimos esta fuente en el que cubrimos incontables casos, pero el que más has ha conmocionado a la sociedad, fue  el de Claudia Mijangos Arzac, que en un ataque de locura privó de la vida a sus tres hijos y luego trató de suicidarse.